El defensor de la Roma hizo mención a la abrupta y sorpresiva salida del enganche del “Xeneize” y aseguró que “se siente la ausencia de Riquelme, es una lástima que se haya ido”. En tanto, Nico se mostró feliz por el presente de su hermano: “Cuando hizo el gol me puse a gritar como loco. Fue muy fuerte que debute con un gol en la cancha donde siempre me venía a alentar”
El defensor surgido de las inferiores de Boca, Nicolás Burdisso, que supo ganar desde dos campeonatos locales hasta tres Copas Libertadores y dos Intercontinentales; se refirió al presente del “Xeneize” con la partida del último ídolo, Juan Román Riquelme, y la incorporación de su hermano Guillermo.
“Se siente la ausencia de Riquelme, pero el equipo se está acomodando. Hay un entrenador inteligente, que ahora está tratando de acomodar al equipo sin un jugador emblemático. Es una lástima que se haya ido, el funcionamiento del equipo no es el mismo y nunca lo va a ser, pero Boca tiene jugadores importantes y con experiencia como para pelear tanto este torneo como la Copa Sudamericana”, consideró el futbolista de la Roma en diálogo con el programa Marca en Zona, que se emite por Radio 9.
Luego, y ya dejando de lado la partida del enganche y ex capitán, Nico no ocultó su emoción por el presente que está atravesando su hermano: “Estaba muy nervioso antes de su debut. Cuando hizo el gol me di cuenta enseguida que había sido él, por la forma de cabecear, y me puse a gritar como loco. Fue un momento lindo. Verlo jugar en Boca para mí fue muy fuerte, que debute con un gol, en la cancha donde siempre me venía a alentar, ver las cosas que consiguió sin que nadie le regale nada”.
“La verdad que no influí para que vaya a Boca, era sabido qué iba a decidir él. Mi hermano es muy pensante, lo hubiera presionado sin sentido. Lo único, en junio, cuando salieron campeones con Arsenal, estuve en Argentina y fui a la cancha de Boca varias veces, y le dije que me gustaba como estaba el club institucionalmente, estaba todo muy tranquilo y ordenado. No sé si lo habrá tenido en cuenta, él después tomó su decisión en base a su sentimiento”, aclaró el ex Inter.
Mientras que culminó reflejando sus ansias de volver a vestir la camiseta “albiceleste”, con la que supo conseguir la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004: “No veo porqué no volver a la Selección. Depende de mí, no depende de ningún otro. Tampoco tiene que ver la historia que yo tenga con la Selección o el conocimiento que el entrenador tenga sobre mí. Si juego, el entrenador me verá, y si no juego, o no lo hago al nivel de antes, seguramente no me tendrán en cuenta”.
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