El delantero de Boca contó que por sus dolencias en el pubis pasará por el quirófano al final de la competencia. "Estaré 20 días parado, me dijeron que va a ser la solución a todo", anticipó.
Ramón Ábila habló este sábado, al término del empate 2-2 con Argentinos Juniors que puso a Boca en la final de la Copa Diego Maradona, acerca de los dolores que sufre en el pubis, cómo los soporta y cómo piensa solucionarlos cuando cesen las definiciones: pasando por el quirófano.
"El dolor aparece, que es lo más lamentable. Se va incrementando el dolor. En el partido pasado con River, que me dolió el pubis, le pregunté al doctor si se rompía, me dijo que no y dije 'entonces le doy hasta que dé, como si estuviera normal'. Se me estira sobre la cicatriz, al no tener aductores -que se me cortaron los dos-, me esta haciendo fuerza, lo vamos a solucionar cuando termine la temporada. Se me hizo una hernia por el problema de pubalgia antigua, mientras tanto me pongo hielo, hago elongación una hora antes de cada entrenamiento. Sigo peleando contra todo porque no es fácil jugar y convivir con el dolor. Cuando termine todo esto me operaré y estaré 20 días parado, me dijeron que va a ser la solución a todo", dijo en ESPN.
"Yo tuve pubalgia de chico, en inferiores de Instituto, se me curó pero reaparece, en Huracán me corté un aductor y en 2019 el otro, y sobre cicatrices se sigue estirando y apareciendo esa molestia que uno no desea. Esto es 24 horas Boca porque me encanta, soy el último que se va todos los días del club, voy a hacer todo lo que sea para sobrevivir en este club", afirmó.
Yendo a lo sucedido en el encuentro, habló de su frustración al errar el penal: "Estaba re caliente porque me resbalé y creo que no valía si entraba por pegarle con las dos piernas. Estamos en otra final, que es lo que queremos. Siento felicidad por el sacrificio y el esfuerzo, todos saben que tienen que rendir al 100. Hace tiempo que venimos jugando los torneos hasta el final, después puede ser victoria o derrota, pero peleamos hasta el final. El miércoles tenemos otro partido decisivo y estamos preparados para afrontarlo".
"Me gusta el gol, lo que más me gusta de jugar a la pelota es hacer goles y cuando erro un penal me quiero matar. Hacer un gol en Boca es hacer festejar a un país, es lo más lindo que hay", dijo, y se enfocó en su tranquilidad para definir en el segundo tanto: "¿Cómo voy a estar apurado yo que tengo la pelota? Apurado esta el que no la tiene. Cuando tenés la pelota adentro del área, tenés el poder".
Por último, habló de los casos de coronavirus en Santos y contó entre risas que cambió camisetas con un conocido que no estaría contagiado. "Me la pidió Marinho, el negro que lo conozco, bueno, con el oscuro, porque ahora decís negro y te denuncian. Es cariñosamente, si digo negro yo, qué queda para los otros".
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