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martes, 8 de marzo de 2016

Orión tuvo un entrenamiento especial para intentar combatir los efectos de la altura

Guillermo Barros Schelotto realizó un táctico sin arquero con el objetivo de probar la formación que enfrentará el jueves a Bolívar. En este contexto, el '1' trabajó aparte con Juan José Romero, quien diseñó un trabajo especial para intentar combatir los efectos de la altura.

Orion entrena con pelotas de voley

La altura no es un mito. Sobrados ejemplos dan muestra que los futbolistas que no están acostumbrados a ella lo sufren y no pueden rendir en plenitud. Por tal razón, varios equipos toman diferentes recaudos a la hora de enfrentarse a los clubes que cuentan con esta ventaja.


Una es la de darle viagra a los futbolistas, ya que mejora la circulación de la sangre y da más oxigenación. Otra, para los que chocan contra Bolívar, es hacer una escala previa en otra ciudad y llegar al lugar del partido pocas horas antesGuillermo Barros Schelotto planea hacerlo, ya que primero se asentará en Santa Cruz de la Sierra y luego irá hacia La Paz.
El 'Mellizo' hoy trabajó con dos equipos conformados por 10 jugadores de campo y ningún arquero. ¿El motivo? Querían realizar un trabajo aparte con Agustín Orion. Más allá de las complicaciones físicas, a esa distancia del nivel del mar, la pelota no viaja de manera tradicional y suele tomar efectos extraños y velocidades superiores a las normales.
Juan José Romero, el entrenador de arqueros, comandó una práctica con balones de voley para simular este efecto e intentar que el '1' se aclimate lo más rápido posible a lo que afrontará el jueves, desde las 21:45, en el Hernando Siles.

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