El delantero pasó de ser titular en la última temporada a perder terreno y marcar pocos goles en la actual.
Mauro Zárate pasó de ser uno de los goleadores de Boca a ser suplente y con un futuro incierto en la institución. El delantero llegó a ser el máximo artillero del Xeneize en un tramo, bajo el mando de Gustavo Alfaro, pero las últimas lesiones lo complicaron bastante y perdió cada vez más terreno.
Durante la temporada 2018/19, fue titular en la mayoría de los partidos y convirtió 13 goles. Todo empezó a cambiar en agosto de 2019, cuando sufrió un desagarro en el sóleo de la pierna derecha. Desde entonces, no logró afianzarse en el once inicial y eso se vio reflejado en las veces que logró convertir: apenas dos tantos, a Lanús y a Arsenal, en noviembre de 2019, su aporte en la red para la coronación en la Superliga.
Se esperaba que con la llegada de Miguel Ángel Russo empezara a tener más lugar: el DT lo explotó en Vélez, cuando daba sus primeros pasos en Primera. El delantero le marcó dos goles a Athletico Paranaense en un amistoso de pretemporada en San Juan, en enero, pero se lesionó contra Independiente en el primer partido oficial del año (una lesión de Grado 1 en el gemelo interno de la pierna derecha).
Encima, el técnico afianzó un ataque conformado por Sebastián Villa, Carlos Tevez y Franco Soldano. De esa manera, Zárate disputó apenas 6 minutos (aante Godoy Cruz) en la recta final del campeonato participando, en total, en 17 partidos en la última temporada, teniendo en cuenta todas las competencias (siendo titular solo en siete de ellos).
Es algo hermoso jugar en este club. Hubo momentos muy lindos y otros en los que hubo que poner el pecho. Se lograron dos títulos y hay que seguir por este camino", expresó en diálogo con TyCsports.com al analizar su etapa en el Xeneize.
Ahora, tanto la CD como Miguel Ángel Russo analizarán si le extienden su contrato, que finaliza el 30 de junio de este año y contaba con una cláusula de renovación automática por otros 12 meses, que no se ejecutará porque no cumplió con la condición de jugar el 50 por ciento de los partidos en la temporada. "Me encantaría seguir en el club, pero no depende sólo de mí... Ojalá pueda seguir jugando con esta camiseta, veremos qué pasa en junio", sentenció.
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