Ante la lesión del delantero, el entrenador del Xeneize podría probar en la semana con un extremo y una referencia de área en el ataque.
El empate 0-0 ante Independiente dejó sensaciones agridulces para el entrenador de Boca, Miguel Ángel Russo, quien por un lado se mostró conforme por la demostración de carácter de su equipo para sostenerse en el partido por una hora en inferioridad numérica, pero que por el otro no tuvo la presencia ofensiva que él esperaba.
Si bien es cierto que el encuentro planeado por Russo se vio dificultado por la temprana expulsión del defensor Carlos Izquierdoz, la prueba del "doble nueve", con Mauro Zárate y Carlos Tevez en el ataque, no pareció funcionar y, ante la lesión del primero de éstos, podría probar variantes tácticas de cara al duelo ante Talleres.
Luego de que de los estudios que se le practicaron a Zárate arrojen una lesión grado 1 en el gemelo interno de la pierna derecha, el técnico del Xeneize podría probar una ofensiva con extremos y una referencia de área. Para el primero de los roles, aparecen como grandes candidatos Sebastián Villa y Eduardo Salvio. El primero de ellos quedó afuera del partido ante el Rojo e ingresó como suplente, mientras que el segundo no tuvo su mejor actuación el domingo en La Bombonera en la derecha de la línea de mediocampistas ofensivos. A éstos se sumaría Ramón Ábila como delantero central, aunque también asoma Franco Soldano como opción.
Más allá de estas variantes, lo cierto es que Russo además no podrá contar con Izquierdoz, quien fue expulsado por doble amarilla ante Independiente. Así, se le presentará una nueva oportunidad al zaguero paraguayo Junior Alonso, quien ingresó en lugar de Agustín Obando el domingo luego de que el Cali viera la roja. Como consecuencia de esto -y ante la salida de Paolo Goltz a Gimnasia-, el juvenil Gastón Ávila tendría la chance de sumarse al banco de suplentes, luego de haber sido destacado por Russo durante la pretemporada.
Finalmente, el cuerpo técnico continuará siguiendo de cerca la evolución del arquero Esteban Andrada, quien no jugó el domingo por estar lesionado. Sin embargo, la gran actuación de Marcos Díaz dejó más que conforme tanto al entrenador como a los hinchas de Boca, por lo que la preocupación no es tan grande como parecía serlo al momento de conocerse la baja del guardameta.
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