El arquero está totalmente recuperado de la fractura de mandíbula y sueña con llegar para la revancha de la Libertadores en el Monumental.
El arquero Esteban Andrada, totalmente repuesto de una fractura de mandíbula, entrenó hoy en forma normal y en Boca se ilusionan con su regreso, que se produciría el sábado 17 de noviembre en el partido por la Superliga ante Patronato, de Entre Ríos.
Andrada, de 27 años, practicó con total normalidad en la cancha principal del predio Pedro Pompilio y se mostró en muy buena forma, mientras sus compañeros se movían en La Bombonera con la mira puesta en la histórica final que Boca animará mañana con River, el partido de ida de la definición de la Copa Libertadores de América.
El ex arquero de Lanús se fracturó el maxilar inferior en el partido de los cuartos de final de la Libertadores ante Cruzeiro en la Bombonera que Boca ganó 2-0 y luego de haber sido golpeado por Dedé.
La intención del cuerpo técnico xeneize encabezado por Guillermo Barros Schelotto es que Andrada regrese ante Patronato en el partido por la fecha 13 de la Superliga a jugarse el sábado de la semana que viene en La Boca.
La lesión que sufrió Andrada, el 19 de septiembre pasado, lo marginó de los partidos revancha ante Cruzeiro, los dos de semifinales frente a Palmeiras y también de la primera final ante River de mañana, aunque si responde bien contra Patronato quizá pueda regresar en la segunda final de la Libertadores, la que se jugará en el Monumental de Núñez el 24 de noviembre.
Durante la ausencia de Andrada el arco de Boca fue ocupado por Agustín Rossi tanto en la Liberadores como en la Superliga, con muy buena actuaciones, y además el club incorporó sólo para la Copa al arquero del seleccionado de Bolivia Carlos Lampe, proveniente del Huachipato de Chile.
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